Marchad
sin pena
amigos
que yo
os observo
alejaros
desde esta
atalaya
de quien
no sabe amar
si no le dañan.
puro cartílago
Contemplas lo que es tuyo,
hasta dónde alcanzan tus dominios:
el ancho cielo rebosante,
cada uno de los rincones de este bosque,
los mansos glaciares
y las febriles tierras volcánicas;
el Amazonas, la Selva Negra,
las Galápagos, Iguazú,
el Fiordo de Milford y el Yu Shang;
Isla Jeju, el Gran Cañón,
los Masurianos y el Vesubio
y a coro todos recitando:
otra vez estás perdido.
Ese hombre
que mira al mundo
vacío de preguntas,
cebado de brutalidad
y desprecio,
capaz de aplastar
entre sus manos
un pueblo entero,
también fue niño.
Mira el cielo: hoy es negro
y ayer era azul.
Todo es -cantan los muertos-
conforme y según.